Volumen: 22 # Número:Numero Extraordinario XIII Congreso del Grupo CAHT
Fecha de publicación : Septiembre de 2018
SIMPOSIO II ANTICUERPOS
ANTIFOSFOLÍPIDOS:
DE LA MESADA A LAS
DECISIONES CLÍNICAS.
PARTE 2:
A LAS DECISIONES
CLÍNICAS |
Accidente cerebrovascular
y síndrome antifosfolípido
Autores: Cortés Guerrieri V
RESÚMEN: El síndrome antifosfolípido (SAF) es una enfermedad
autoinmune que se caracteriza por la presencia
de trombosis arterial, venosa y/o alteraciones obstétricas
en individuos con anticuerpos antifosfolípidos
(aFL) persistentemente positivos. Es la causa más
frecuente de trombofilia adquirida. Su presentación
clínica es heterogénea. Los criterios de laboratorio
actuales incluyen la determinación del anticoagulante
lúpico (AL), anticuerpos anticardiolipinas
(aCL) y antibeta2glicoproteína I (aβ2GPI) en títulos
intermedios a altos en dos determinaciones separadas
por 12 semanas.
El SAF puede estar asociado a otras enfermedades
autoinmunes como el lupus eritematoso sistémico
(SAF secundario), o bien presentarse en ausencia de
otras patologías (SAF primario).
Su prevalencia se estima en 40 a 50 casos/100.000
personas. La incidencia es de 5 casos nuevos por
cada 100.000 personas por año(1). La mediana de
edad al diagnóstico es de 31 años (15-50 años). La
tasa de supervivencia a 5 años es de 90 a 94%(2).
El accidente cerebrovascular isquémico (ACVi) es
una de las principales causa de morbi-mortalidad
a nivel mundial. Las causas más frecuentes son la
aterosclerosis, hipertensión, diabetes, hipercolesterolemia
y el cigarrillo.
El objetivo de esta revisión es analizar los datos
disponibles sobre una etiología menos frecuente de
ACVi, el SAF.
Palabras clave: antifosfolípido,
accidente cerebrovascular,
antitrombótico.
Páginas : 73-78
|